El funeral por el tío Philips estuvo entretenido. La misa duró una eternidad. Todos querían hablar sobre el tío Philips: la Reina de Inglaterra, sus hijos, sus nietos, los cónyugues, también la realeza extranjera. Mi Felipe lo pensó mejor y no dijo nada. Hizo bien. Ya había mucha gente que hablaba.
La música no la entendí. Creo que era música gótica. Chillaban tanto que uno de mis oídos quedó trastornado. Tengo como un eco. Casi hubiera preferido una música suave, sin estridencias. Me acordé de mi suegro escuchando aquellos gritos chillones. A don Juan Carlos nunca le gustó la música clásica; es más de mariachis.
También me acordé de Alfonso Guerra. El ex presidente del Gobierno dijo el otro día que mi suegro no puede morir en el desierto. Hay que traerlo para España. Quise comentar el asunto con mi Felipe, pero se negó.
-Estamos en Londres, Leta. Recuerda que Corinna demandó a mi padre por acoso.
-¿Está Corinna en este funeral?
-Esperemos que no aparezca.
No dije más. De Corinna es mejor no hablar. Como dice mi doncella Maripuri, es una señora muy mala. Nunca quiso mucho a mi suegro. Más lo quiere doña Sofía. Mi suegra sigue enamorada de su Rey Emérito.
Regresamos a Madrid sin ir a ver a Leonor a Gales. Leonor está de campamento incomunicado. Hay que respetar las normas de su colegio. Por eso no le hemos enviado unos vestidos para chica mayor que le regaló su prima Victoria Federica. Desde que es influencer le regala ropa a todas las mujeres de la familia.
| | Fue Letizia y nuestro Rey a la cercana Inglaterra a llorar por ese tío que llaman el tío Philip los de la gran realeza. ... newyorkchic1.blogspot.com |
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